Riesgo Operativo

El riesgo está en todas partes, y las empresas no están exentas de él. Sin embargo, antes de comenzar con este informe solicitado por uno de nuestros lectores habituales, haremos un breve repaso sobre qué es el riesgo.

Cuando hablamos de riesgo siempre lo relacionamos a una inversión, dado que se relaciona con los movimientos del mercado a través del tiempo. Por ello, también aparece el concepto de volatilidad. En este sentido, la volatilidad indica si históricamente los valores liquidativos del instrumento de renta fija mostraron variaciones de importancia o si evolucionaron de manera estable.

Entonces, si un instrumento tiene una amplia volatilidad, cuando nos retiremos de la inversión podremos salir con grandes ganancias o bien pérdidas importantes. En consecuencia, el riesgo es la probabilidad de ocurrencia de un evento adverso y sus consecuencias.

La semana pasada hablábamos sobre el riesgo financiero, que es la probabilidad de ocurrencia de un evento que tenga consecuencias financieras negativas para una organización.

También destacamos que existen varios tipos de riesgos financieros:

  • Riesgo de mercado: fluctuaciones de los mercados financieros, donde podemos desagregar:
  1. Riesgo de cambio: volatilidad del mercado de divisas.
  2. Riesgo de tasa de interés: volatilidad de los tipos de interés.
  3. Riesgo de mercado propiamente dicho: volatilidad de los mercados de instrumentos financieros como acciones, deuda, derivados, etc.
  • Riesgo de crédito: posibilidad de que una de las partes de un contrato financiero no asuma sus obligaciones.
  • Riesgo de liquidez: riesgo de que una de las partes de un contrato financiero no pueda obtener la liquidez necesaria para asumir sus obligaciones.

¿Qué es el riesgo operativo?

En esta oportunidad, saldremos de los problemas de las inversiones financieras, para dedicarnos pura y exclusivamente en el riesgo de empresa, o riesgo operativo como suele llamarse.

Sabemos desde ya que el riesgo es básicamente la incertidumbre sobre los resultados futuros. El riesgo operativo es el de no alcanzar en capacidad a cubrir lo costos de operación. Es decir, mientras aumentan los costos fijos de operación de una empresa, se debe lograr un volumen de ventas para cubrir todos los costos de operación. Para simplificarlo, a medida que una empresa aumenta sus costos fijos de operaciones, también aumenta el volumen de venta necesaria para equilibrarlos. Sino, los costos superarían las ventas, y tendríamos una empresa no beneficiosa o que el riesgo operativo se haya transformado en realidad.

Para medir el riesgo, normalmente se plantea calcular el punto de equilibrio, que hace las veces de un buen índice de riesgo operacional de una empresa. A medida que sea más alto el punto de equilibrio de una empresa, mayor es el riesgo operacional existente.

¿Cuál es el resultado de un aumento de los niveles de riesgos operativos?

Cuando una compañía posee un alto punto de equilibro, debe producir y vender muchísimo más, y comienza a apalancarse para poder financiar las operaciones.

A medida que aumenta el aplanamiento operativo por medio de mayores costos fijos de operación, aumentan el volumen de equilibrio de la empresa; un círculo vicioso, pero con una consecuencia, que vista desde el lado del mercado interno, es positiva: hace que aumenten las ventas.

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