Dentro de los términos económicos que hemos estado presentando, uno que llama la atención y se cataloga como de gran importancia, es la Solvencia Financiera. Pero, antes de seguir adelante, debemos saber ¿Qué es la solvencia? Este concepto es fundamental a la hora de analizar ratios financieros, a lo que respondemos es que, la solvencia es tener la suficiente capacidad para hacer frente a sus obligaciones contraídas.
Entonces, sabemos bien que la solvencia financiera sería la capacidad financiera (o bien, capacidad de pago) de la empresa para cumplir sus obligaciones de vencimiento a corto plazo y los recursos con que cuenta para hacer frente a tales obligaciones.
Si queremos que nuestra empresa tenga solvencia financiera, debe tener en sus haberes la cantidad necesaria de dinero o activos líquidos para hacer frente a los pasivos contraídos, al vencimiento de los mismos y mantenerse de igual manera en el futuro. De nada sirve afrontar el vencimiento más próximo si a la próxima semana no podremos hacernos cargo de las deudas.
Un punto que siempre destaco es la diferencia con la liquidez. Claramente, estamos en oposición a un tema ya hablado, la liquidez. Cuando se posee liquidez se tiene el efectivo necesario en el momento oportuno que nos permita hacer el pago de los compromisos contraídos. En cambio, ser solvente es contar con los bienes y recursos suficientes para respaldar el endeudamiento contraído, pese a ser diferentes al efectivo.
Solvencia es contar con los bienes y recursos suficientes para respaldar los adeudos que se tengan contraídos, aún cuando estos bienes sean diferentes al efectivo. Por su parte, liquidez es cumplir con los compromisos y solvencia es tener con que pagar esos compromisos, para tener liquidez se necesita tener solvencia previamente.
Hablar de solvencia es hablar de liquidez, la diferencia radica en que la liquidez es tener el efectivo necesario en el momento oportuno para tener le oportunidad de efectuar los pagos de los compromisos anteriormente contraídos, por su parte, la solvencia es contar con los bienes y recursos suficientes para respaldar los pasivos que se tengan contraídos, aún cuando estos bienes sean diferentes al efectivo.
Recordemos que las agencias calificadoras, como Standard & Poor’s, Moody’s, entre otras, utilizan la calificación de solvencia para analizar el historial de crédito de un prestatario considerando varios factores tales como:
- Pagos atrasados
- Tiempo de establecimiento de crédito
- El monto de crédito usado versus el monto de crédito disponible
- Tiempo de residencia en el domicilio actual
- Historial de empleo
- Información negativa del crédito como bancarrotas, créditos incobrables, cobros, etc.